viernes, 3 de marzo de 2006

Esas grandes decepciones (II)

Como lo prometido es deuda, y yo me tengo por buen pagador -aunque mis acreedores afirmen lo contrario- retomo el post anterior y continuo mi lista de tebeos que hiciero más ruido de lo que merecian tan escasas nueces.

Barrio Lejano (Jiro Taniguchi): No es mal tebeo, pero aunque las críticas quisieron compararlo con su antecesor, El almanaque de mi padre, lo cierto es que le falta mucho para rayar donde rayara este. Tampoco es algo que se le pueda echar mucho en cara al propio tebeo; el problema aquí está más bien en el hecho de que El almanaque es una obra verdaderamente excepcional y a nada que uno tuviera puesta sus ilusiones en leer otra igual solo por ser del mismo autor, la decepción era inevitable.



David Boring (Daniel Clowes): Más de lo mismo. Fue tan grandiosa la lectura de su Ghost World, que era imposible que David Boring la pudiera igualar. En este caso el problema es mayor, pues las reseñas que se hicieron no solo apuntaban a que Clowes había sabido mantener el nivel, sino que, según ellas, hasta lo elevaba. Por mi parte dire que aunque es un tebeo de ambiente fascinante, entre lo onirico y lo pesadillesco, lo cierto es que se me escapan las intenciones del autor y acabo comprendiendo poco. Problema mio, pero como la lista la hago yo...



Pildoras azules (F. Peeters): Con este comic me cabe la duda de si lo poco que me gustó se debe realmente a deméritos suyos o al momento en que lo leí, sin duda no demasiado afortunado en mi vida. Con todo, es una obra que me dejó siempre fuera de su planteamiento, incapaz de entrar en la historia o de identificarme con el drama de sus personajes. Seguramente el hecho de que fuera galardonada con el premio a la mejor obra extrangera del 2004 por La carcel de papel también contribuyo a mi desilusión.



Trazo de tiza (Miguelanxo Prados): Una obra curiosa, con unos colores muy atractivos y un halo entre misterioso y mágico ciertamente absorvente. Sin embargo el final se carga la obra. Dando por supuesto que lo he entendido -lo cual reconozco que es mucho suponer- el argumento se me antoja en verdad simple y no demasiado inspirado.



Ya veis que con este listado no tengo razones demasiado convincentes como para justificar mi desilusión; valga decir simplemente que leyendolos no me acabaron de gustar tanto como esperaba.

3 comentarios:

  1. Venga bah, te doy una pista para entender trazo de tiza; paradoja temporal.

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  2. Muchas gracias, doc, por la pista, pero me temo que mis sospechan iban precisamente por ese camino, el mismo que me lleva a calificar al argumento de simple y poco inspirado.

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  3. Barrio lejano es un autoremake de "el almanaque de mi padre". Yo tambien prefiero y por mucho "el almanaque...", porque es redondo como él sólo y no recurre a artificios.

    "Pildoras azules" es buen tebeo, pero Peeters tienen bajones cuando va de escritor, así que le queda irregular. Esa escritoritis hace que "lupus" aparezca repleta de textos de apoyo redundantes, redichos e incluso vacuos.

    Lo de "trazo de tiza" dependde de lo que te molen los finales abiertos. De hecho, estar seguro de que la explicación es una y sólo una me parece un error, por eso Prado no hizo el epílogo explicativo que tenía pensado.

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