Evidentemente si Moore es un genio del cómic lo es por haber escritos los guiones de Watchmen, de From Hell, de Miracleman, de V de Vendetta, de... Pero me da a mi que donde realmente se ve la verdadera envergadura del guionista inglés es en cómics como The forty-niners, o en toda su línea ABC, obras que sin pretender ser otra cosa que productos comerciales de consumo alcanzan un nivel tan digno que yo me atrevería a decir que incluso sin sus obras maestras Moore seguiría siendo el mejor guionista de las últimas décadas. Resulta increíble comprobar la capacidad que tiene esté hombre para transcender todo los géneros que toca, para darles un barniz de credibilidad incluso a las propuestas más inverosímiles. En este caso Moore -y Gene Ha- regresan a su ciudad superheroica para contarnos con una coherencia impecable los orígenes de Neopolis y su esforzado cuerpo de policía allá por el 49, en los primeros años de posguerra. Una maravilla que combina superhéroes, científicos nazis, robot marginados, vampiros mafiosos y tramas policiales con tanta naturalidad que a uno le acaba pareciendo lo más normal del mundo. Vamos, lo que se puede encontrar cualquier día corriente al salir a la calle. Por cierto, magníficos los colores de Art Lyon, que sacan lo mejor de los lapices de Ha.
En resumen, otra muesca más en la cuenta de Moore, y van ya...
Puntuación: 9
Puntuación: 9
Ya le he comentado alguna vez que creo que Moore va a gustarme mucho, así que no puedo hacer otra cosa que una lista con los comics que usted me recomienda y leerlos.
ResponderEliminarEs la mejor opción.
Besos y más besos...
Dios, cuantas lecturas pendientes, y encima tendrá que simultanearla con la besos, que serán aun más numerosos. Vamos, que no nos vamos a aburrir.
ResponderEliminarPor variar: un abrazo. Eso sí, bien fuerte.