Si hace unos días y unas entradas hablaba de la necesidad de revisar mi listado de decepciones tebeísticas, ahora debería en justicia decir lo mismo del de mis tebeos favoritos. Porque si he de ser sincero –y supongo que he de serlo- pocos son los cómics de entre todos los que he tenido oportunidad de leer en mi vida que superen en calidad a La guerra de las trinchera. O incluso siquiera que lo igualen. Como pocas son las ocasiones en las que se puede encontrar una simbiosis tan perfecta entre texto y dibujo, rayando ambos a un altísimo nivel sin obstaculizarse por ello ni hacer cada uno la guerra –de las trincheras- por su cuenta. En este sentido debo reconocer que la obra de Tardi me ha sorprendido grata y profundamente por partida triple:
1.- Por el más que notable nivel literario de unos textos que jamás caen en la pedantería o en lo artificioso, dotando así a la narración de un grado de intimidad y sinceridad verdaderamente conmovedor. Tardi es un buen escritor, con gran pulso narrativo, no sólo en el empleo del dibujo, sino también en el de la palabra, incluso en el de la palabra desnuda, como demuestra cuando nos cuenta exclusivamente por escrito la anécdota vivida por su abuelo.
2.- Por lo ágil y evocador de su dibujo, un dibujo, el de Tardi, que es engañosamente simple, pero que sin embargo trasmite con tremenda fuerza y lirismo tanto las terribles condiciones impuestas por la guerra como las diversas emociones suscitadas en sus personajes: el trabajo gráfico del francés, cuidadoso y documentado hasta el detalle más nimio, tiene la capacidad de arrancar al lector de su realidad y trasladarlo directamente a la humedad embarrada de las trincheras y hacerlo participe de la desolación de un mundo en ruinas.
3.- Por la naturalidad y la armonía con la que fluyen ambos; por la perfección, como ya he dicho antes, con la que se complementan, creando una sinergia que eleva aún más la calidad de la suma de elementos, dando lugar a una obra que se puede considerar redonda en su ejecución.
1.- Por el más que notable nivel literario de unos textos que jamás caen en la pedantería o en lo artificioso, dotando así a la narración de un grado de intimidad y sinceridad verdaderamente conmovedor. Tardi es un buen escritor, con gran pulso narrativo, no sólo en el empleo del dibujo, sino también en el de la palabra, incluso en el de la palabra desnuda, como demuestra cuando nos cuenta exclusivamente por escrito la anécdota vivida por su abuelo.
2.- Por lo ágil y evocador de su dibujo, un dibujo, el de Tardi, que es engañosamente simple, pero que sin embargo trasmite con tremenda fuerza y lirismo tanto las terribles condiciones impuestas por la guerra como las diversas emociones suscitadas en sus personajes: el trabajo gráfico del francés, cuidadoso y documentado hasta el detalle más nimio, tiene la capacidad de arrancar al lector de su realidad y trasladarlo directamente a la humedad embarrada de las trincheras y hacerlo participe de la desolación de un mundo en ruinas.
3.- Por la naturalidad y la armonía con la que fluyen ambos; por la perfección, como ya he dicho antes, con la que se complementan, creando una sinergia que eleva aún más la calidad de la suma de elementos, dando lugar a una obra que se puede considerar redonda en su ejecución.
Pues sí, redonda en su ejecución y redonda también en su planteamiento porque, a pesar de lo documentado del dibujo, a pesar de que pueda –y tal vez deba- leerse en clave documental, La guerra de las trincheras es, antes que el retrato de los horrores de una época y un acontecimiento determinado -el período que va desde 1914 a 1918 y la sangrienta marca que lo atraviesa, la I Guerra Mundial-, es fundamentalmente, como iba diciendo, el dibujo de los padecimientos sufridos en carne viva por seres humanos con nombres y apellidos concretos – nombres que siempre son resaltados en mayúsculas-, de personas que se ven alienadas, que pierden las riendas de sus propias vidas para convertirse en el utillaje de la barbarie, con la misma importancia y con la misma independencia –con la misma falta de ella- que cualquier bala de cañón o cualquier fusil. Así por sus páginas merodean sentimientos tan humanos como el miedo, la desesperación, el escandaloso asombro ante lo absurdo o el anhelo por la vida arrebatada. Un cómic en el cada anécdota esta impregnada del amargo sabor de la guerra, de esa profunda inutilidad y esa cruel estupidez que la caracterizan, pero sin caer por ello -tal es la eficiencia de su perfecta ejecución- en la tan molesta sensación de estar en presencia de un panfleto antibelicista, algo que suele ser habitual en obras del mismo carácter. El trabajo de Tardi, por el contrario, convence por su emotividad y su veracidad
En fin, un buen puñado de relatos que constituyen en conjunto una de las más grandes y sólidas cimas del noveno arte.
Puntuación: 10
En fin, un buen puñado de relatos que constituyen en conjunto una de las más grandes y sólidas cimas del noveno arte.
Puntuación: 10
"La guerra de las trincheras" Llevo muchísimo tiempo buscando este cómic, pero está agotado y de momento no lo editan. Se que puede sonar raro, pero si en algun momento has pensado en venderlo estoy dispuesto a pagar un precio bastante alto.
ResponderEliminarUn saludo, y perdón por la extraña sugerencia.
Pues siento mucho decirlo, pero yo tampoco tengo La guerra de las trincheras (qué más quisiera yo). Pero si no te importa leer en pantalla, y para ir saciando la curiosidad mientras lo reeditan o no, puedes encontrarlo aquí:
ResponderEliminarhttp://lamansion-crg.net/forum/index.php?showtopic=11961&hl=la+guerra+de+las+trincheras
Un saludo.
Oye muchimas gracias. Desde luego es mucho más de lo que estoy consiguiendo, y srve para acercarse a esta maravilla, mientras esperamos.
ResponderEliminarUn saludo, y gracias de nuevo.
Hola, he intentado abrir el link que me mandaste sobre "La guerra de las trincheras" de Tardi, pero me ha resultado imposible.¿Tú has conseguido verlo? ¿Sabes si puede verse de otra manera, o si es necesario regisdtrarse en esa página? Siento mi ignorancia, y espero no importunarte con mi insistencia.
ResponderEliminarUn saludo y muchas gracias.
Hola David.
ResponderEliminarA mí si me funciona el enlace y creo que no es necesario estar registrado. Lo que si necesitarás es un programa p2p, como emule.Una vez tengas instalado el programa psp el enlace lo usará para descargarte el cómic.
Si tienes alguna otra duda no dejes de preguntar.
Un saludo.
Hola, por fin encontré el programa para abrir "La Guerra de las Trincheras" de Tardi. Solo era para agredecerte tu ayuda. Un saludo y hasta siempre.
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